¡SECRETOS¡
Cuando tú lees, este libro se despierta, y te dice que se llama ¡Secretos¡ Las pestañas de sus páginas te miran asombrados, abre sus ocultos sentimientos de su corazón de papel y tinta, de su cuerpo hecho de palabras.
En este libro, Enrique José Granados Torrez pinta arco iris con las palabas, hace que un tren de sueños se deslice entre rieles de fantasía, crea una mosca que revolotea y habla, pero sobre todo, juega con las frases y los enunciados, que los convierte en sentimientos y emociones, que hacen vibrar las cuerdas de nuestros corazones.
Este es un libro chavalo, que quiere ser leído, imaginado, creado, cuentero de la escuela, coplero del relato, canto de la vida, prosa narrativa, explosión de alegría, chimbomba de secretos, corazón de caramelo, piñata de recuerdos, en una fiesta rumbera del espíritu.
jugar a conocer, jugar a hacer, jugar a ser y jugar a convivir; donde la lectura es un aprendizaje íntimo, que va del yo individual, al yo social; donde la familia es primero, un núcleo de amor y compromiso.
La lectura de ¡Secretos hace placentera la clase, placer al actuar, al ser otro, al darse y ser recibido. Porque esta novela escrita pensando en los niños y niñas tiene duende, tiene magia, derroche de imaginación, desbordes de fantasía y de creación.
Cuando lees ¡Secretos¡ puedes interpretar a Enrique o a Polonchito, personajes vivos, creados desde la plasticidad de sus cuerpos, que bailan en la vida en un son de armonía en cada uno de sus movimientos.
Entonces tú te contagias de la magia de este libro y te convierte en otro personaje, abres tus brazos, y los conviertes en alas, tu cuerpo es de plastilina; te vuelves mariposa, estrella, pájaro, rosa, pez, venado; te convierte en sonatina, en cenicienta, en una mama, hasta en una abuelita, que se la quiere comer el lobo.
¡Secretos¡ de Enrique José Granados Torrez es manantial de palabras, un maizal de historias, al son de la palabra, entonada, sentida y expresada.
La palabra dulce, la palabra que acaricia, la palabra pegajosa, que empalaga la vida, que sustentante nuestro ser.
La palabra que crea, que inventa, que abre los sortilegios y el misterio de todas las cosas. La palabra que se multiplica, y se vuelve verbo y sustantivo, la que te dice te quiero, y se hace acción, conflicto y novela. El libro es para contar historias, como un gran espejo de la vida, donde nos vemos todos a como somos, a cómo debemos de ser.
Este es un libro bello, porque es una expresión de un todo universal, de vos y de lo que te rodea. Es una novela para sentir, para emocionar, para reír, para llorar, pero también es para pensar y después reflexionar. Este es un libro-niño, alegre, vivaz, juguetón, travieso, inteligente como vos.
Recorrido de la vieja Managua en caponera
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