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AUN ESPERADO, IMPACTÓ.-La muerte del legendario Muhammad Alí, para muchos, el más grande peleador que ha existido, en lo cual, coincido plenamente, era esperada desde hace un buen rato, pero no por eso, dejó de estremecernos y dolernos. Cuando se coronó en 1964 paralizando al mundo derrotando a Sonny Liston, en lo que podría calificarse como un "cambio de cadáver", porque se suponía Alí sería el muerto frente al golpeo destructuvo del "Oso", yo estaba saliendo del bachillerato, aún distante de convertirme en un cronista de deportes. Ya era un apasionado del boxeo. Un admirador de Joe Louis, de Rocky Marciano y de Archie Moore. Lo vi golpeado severamente por el terrible Mal de Parkinson en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Atlanta y en los de Sidney, y me impresionó seguir por televisión su visita a Cuba. Fue algo realmente conmovedor. El más grande de todos los tiempos, el rey de la jactancia, tan disminuido.
GANABA DESDE ANTES.-¿Cómo olvidar los ojos agrandados por el susto de Sonny Liston frente a la agresión verbal del entonces Cassius Clay? Una catarata de insultos bien escogidos y bien hilvanados, hasta con rima. Cassius acostumbraba a ganar todos los "Rounds cero", antes del sonar de la campana y con Liston en 1964 fue tan implacable como en 1974 con George Forreman…Viendo crecer a Clay convirtiéndose en Muhammad Alí, me convencí que la jactancia cuando tiene soporte, camina de la mano con la excelencia. Gritar ¡Soy el mejor! implica el compromiso de demostrarlo, y Alí tomaba eso muy en serio porque nunca iba a permitirse engañarse a si mismo. Tenía que ser su principal y firme creyente. De no ser así, no tenían chistes sus descargas verbales…En esta rara y efectiva tarea, Alí se especializó.
Con Nelsón Mandela
COMO LO EXPLICA.-En una entrevista realizada por Alex Haley de la famosa revista Play Boy, le preguntaron: ¿Usted es realmente el exhibicionista?...He estado atrayendo la atención desde el momento en que empecé a caminar y hablar. Cuando no era más que un chiquito e iba al colegio, comprendí que a casi todo el mundo le gusta observar a la gente que no se comporta como los demás. Por ejemplo, yo no iba al colegio en el ómnibus, corría al colegio junto al ómnibus, y todos los chicos me saludaban y me gritaban y me llamaban loco. Eso me convertía en alguien especial. O durante los recreos empezaba a pelear con alguno para atraer una multitud. Siempre me gustó atraer a las multitudes. Desde mis primeras peleas le cantaba a gritos, a cualquiera que quisiera escucharme, lo que le iba hacer a los rivales y como casi siempre cumplía, la gente se molestaba y llegaba a mis combates con la esperanza de que me vencieran.
TARDO EN RETIRARSE.-Alí cultivando la más grande egolatría en la historia del deporte, rechazó la posibilidad de un retiro a tiempo. Consideraba que su verdadera grandeza, siempre estuvo entre las cuerdas aunque haya sido invitado para hablar sobre poesía en la Universidad de Oxford, o brindar charlas y discutir con los estudiantes en la Universidad de Harvard, o ser un visitante de la Casa Blanca. El gran problema de Alí fue intentar —contra todo tipo de riesgos— seguir siendo una leyenda para todos y para él mismo, considerando que siempre hay algo que intentar mientras se tengan fuerzas. ¿Cuántos golpes en la cabeza pudo haber evitado con un retiro a tiempo?...¿'No era su dramático y estrujante triunfo sobre Frazier en Manila, el momento preciso para decir ¡No más!?... ¿No fue una imprudencia temeraria retar a Larry Holmes cuando ya sus reflejos estaban adormecidos y el vigor de sus músculos se había desvanecido? Pero lo hizo.
Con Alexis Argüello
¿OTRO COMO ES?.-Gracias por los recuerdos. Nunca tendremos a otro como él. Disfrutaba gritar "Soy el Más Grande". Y cuando era presentado de esa forma, interrumpía para entonar. "De todos Los Tiempos". Pero siempre con una risa. Para él, la vida era divertida, hasta el día en que lo golpeó Parkinson…No se lamenten por mí", le ha dicho a los amigos. "Si tuviera que hacerlo todo de nuevo, no cambiaría nada". Retó al Gobierno de USA, diciendo, "No tuve ninguna riña con los del Vietnam. ¿Por qué voy a ir a agredirlos?. Eso le costó tres años y medio en un exilio boxístico. Regresó después de tres año y medio de castigo y aunque volvió a captar la atención del mundo, como boxeador, no volvió a ser el mismo y pocas veces alcanzó ser una aproximación. Sus tres batallas con Joe Frazier, la que realizó con Foreman en Zaire y la trilogía con Norton, son sus más memorables. Un peleador inolvidable.
TIJERETAZOS.-Tan atractivas como son las propuestas de ENIMOSA a su clientela, así fueron las peleas de Muhammad Alí. Quizás por eso Alvaro Rodríguez tiene un poster del gran peleador en su oficina. Visiten ENIMOSA en el paseo Tiscapa…Aquí tienen frases de Alí: "La renuncia de Nixon sorprendió, pero no tanto como el nocaut que le voy a propinar a George Foreman"…"Soy Muhammad Alí, no necesito usar cinturón de seguridad en un avión"…"Estar atrapando moscas es un excelente entrenamiento de agilidad"…"Cuando eres grandioso es difícil ser humilde"…"No importa que me abucheen siempre que paguen por verme pelear"…"Donde vivía entre la pobreza, aprendí a esquivar pedradas, mas difícil que hacerlo con los golpes que te envía el otro"… "La amistad no es algo que se aprende en la escuela"…"Mi primer mandamiento es ser fiel conmigo"…"Soy un científico del boxeo y un maestro de baile, luego es imposible vencerme".
Por Edgard Tijerino M. /etm@doble-play.com
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