HUMBERTO JOSE SOLIS BARKER

In memoriam

Humberto José Solís Barker, mejor conocido entre sus familiares y amigos como "Pepe Solís", nació en la bella ciudad de dos pisos del departamento más verde de Nicaragua, cuando éste era parte todavía del gran Chontales.

Fue el único varón de los cuatro hijos procreados por el feliz matrimonio que conformaron sus padres, Humberto Solís Carnevallini y Vera Barker Barquero. Don Humberto, pertenece a la antigua y dilatada familia Solís de reconocidos méritos, y cuyas profundas huellas permanecen en la historia de Managua porque muchos de sus miembros se distinguieron tanto en las funciones municipales, como en las sociales, económicas y políticas. Sus ancestros Juan María Solís Gómez y Marcial Solís Guerra, fueron Alcaldes de Managua durante varios períodos. La familia Solís fue fundada por don Deogracias Solís y doña María del Pilar Tejada, tronco común de donde se derivan las familias Solís Guerra y Solís Avilés. Don César Solís Avilés y su esposa Clelia Carnevallini, fueron los padres de don Humberto Solís Carnevallini.

Su abuela Chepita Barquero Fajardo, prima hermana de mi abuelo Antonio Barquero Fajardo, fue hija de don Benedicto Barquero Figueroa y de Doña Celestina Fajardo. Don Benedicto fue hermano de mi bisabuelo Pedro Joaquín Barquero Figueroa.

En el Tribunal de Apelaciones de Managua donde tuve la suerte de compartir labores con el doctor Solís Barker, éste nos contaba sobre su decidido y osado matrimonio con la mujer que fue el amor y norte de su vida, Doña Aurorita Reyes, cuando él era un estudiante de la carrera de Derecho y ella una agraciada y distinguida dama de la sociedad leonesa. En este contexto, el doctor Solís Barker nos narró todas las vicisitudes por las que pasó aquel joven e inexperto matrimonio, construido sobre las bases del amor, la esperanza y el respeto a sus semejantes.

Estos valores que compartieron los cónyuges Solís-Reyes, dieron frutos fecundos y fueron la cuna donde se originaron las estimables familias Noguera Solís, Arana Solís, Caldera Solís, Solís Fernández y Solís Méndez, productos de aquella estirpe.

El doctor Humberto José Solís Barker figuró destacadamente en la historia reciente de nuestra patria. A partir del año mil novecientos setenta y nueve abandonó el ejercicio privado del derecho para integrarse como miembro del Consejo de Estado. Con posterioridad y sucesivamente, desempeñó los cargos de: Diputado, Magistrado Fundador del Tribunal Superior del Trabajo, Magistrado Fundador del Tribunal Nacional Laboral de Apelaciones. Desempeñó la Presidencia de estos Tribunales y dejó en ellos la impronta de su numen, desde luego que como Magistrado Laboral del Tribunal de Apelaciones de Managua, le correspondió la honrosa función de ser pionero en la administración jurisdiccional en nuestro nuevo y actual Código del Trabajo.

La jurisprudencia laboral nicaragüense, en gran medida, le debe sus aciertos al doctor Humberto José Solís Barker.
Hoy que conocemos y lamentamos su muerte, debemos congratularnos también por haber tenido la oportunidad de contar en la administración de justicia con un personaje de gran capacidad jurídica, moral e intelectual como el doctor Solís Barker, a quien despedimos confiados en que la posteridad le recordará, agradecida por la transcendental labor que Solís Barker desempeñó en pro de la justicia y del pueblo trabajador nicaragüense.

¡Que descanse en paz!, y que su familia se sienta orgullosa por su trayectoria, legado póstumo del doctor Solís Barker que con toda seguridad conservará y cultivará amorosamente su esposa doña Aurorita, para quien pedimos los mejores augurios en unión de su estimable familia.

Managua, veinticuatro de agosto de dos mil doce
Dolores Alfredo Barquero Brockmann
Magistrado Tribunal de Apelaciones de Managua