Convivir con los sismos,
parece el dilema
La vida continúa
"La vida continúa, hay que seguir adelante, a pesar de las tragedias que nos pueden dejar los sismos", dijo Francisco Bonilla, propietario de un taller automotriz.
Paradójicamente en el taller se reparaba un camión con un emblema que decía: "!Que siga la fiesta... al suave!".
Como salvaguardar la vida
Los sismos y las réplicas sacaron a la gente de los barrios a las calles, buscando un lugar seguro.
Mientras en los centro de trabajo y oficinas, también buscaban un lugar seguro, poniendo en prácticas las medidas recomendadas de seguridad.
Una manera
práctica de
estar segura
Doña Berta López, de barrio Riguero, dijo que una manera práctica de estar segura ante los sismos, fue instalar una hamaca en el porsche de la casa.
Viacrucis en los barrios
Mientras los sismos amenazaban, el tradicional Víacrucis "casero" recorría las calles en el barrio Riguero, donde según la costumbre, la imagen pernocta un día en cada hogar, hasta completar las estaciones del Víacrucis.
Preparando procesión de Las Palmas
Humberto Bendaña, del Camino Neo-Catecumenal de la parroquia de El Redentor, en medio de la tensión de los sismos del día viernes, preparaba las palmas para el Domingo de Ramos, conocida también como la procesión de "La Burrita".
Restaurante y bares "a medio gas",
otros cerraron
El restaurante "Pirata de Caribe", cerró a las 8:00 pm, tras el fuerte sismo del jueves y sus réplicas, para resguardar la vida de clientes y trabajadores, dijo Bosco Hernández, gerente del lugar.
El día viernes, después del fuerte sismo de las 3 de la tarde, el restaurante permanecía vacío. Las ventas han mermado igual que la clientela, señaló Hernández.
Mirador Tiscapa cerró el viernes
La gerencia del Mirador Tiscapa decidió cerrar sus portones el día viernes, no hubo atención, en un día en que este centro "se llena".