Por Isidro Rodríguez Silva

DONALD CHAMORRO, UN SUEÑO MUSICAL HECHO REALIDAD

Todo verdadero artista tiene un sueño muy especial, porque se sueña cuando se está despierto. Pero no es un sueño de un instante, sino diario, constante, recurrente. Y como todo gran artista, Donald Chamorro ha tenido un sueño musical. No es cantautor, ni mucho menos compositor de baladas. Su sueño es una locura musicalmente hablando, y es formar un grupo de cámara dedicado, fundamentalmente al trabajo cultural. Un grupo de cámara está conformado por reducido grupo de instrumentos, en contraposición a la música de orquesta.

¡Qué locura¡ Un grupo de cámara en un país como el nuestro, contaminado musicalmente, donde las radios nacionales ni siquiera cumplen la ley 215, que orienta fomentar la música nacional en sus programaciones radiales. Cuando tuvo este sueño Donald Chamorro, cuando estudió fagot con la profesora Franz Hughes, o cuando realizó estudios intensivos de flauta traversa en Cuba. No lo sabemos, pero la realidad es que formó el grupo de Cámara que lleva el nombre de Kinteto. Algunos pensaron que su vida sería efímera, o que se dedicarían únicamente a tocar en bodas y fiestas privadas. Pero no, el sueño del hoy Maestro de la música nacional, Donald Chamorro, iba más allá de lo comercial, lo llevó al corazón mismo de la investigación, rescate y promoción de la música nacional.

El sueño se volvió realidad, al convertir al grupo de Cámara Kinteto en uno de los conjuntos más conocidos en el país por su virtuosa versatilidad musical. Su repertorio, como el de los conjuntos musicales fundados por nuestros más grandes compositores de 1900, abarca desde los clásicos nacionales e internacionales, hasta el folclor y la música popular en arreglos de los Maestros Pablo Buitrago Molina, actual Director Titular de la Orquesta Nacional de Nicaragua y Hugo Sandino, Director adjunto de la misma orquesta, entre otros expertos arreglistas.

La propuesta artístico-Cultural del trabajo ha favorecido una visión acertada del arte musical en Nicaragua. El aporte al Arte Nacional es presentar, en un mismo recital, canciones conocidas del folclore y de compositores populares a la par de nuestros compositores académicos. Esto es la vinculación total y efectiva de la manifestación popular y académica en la música nicaragüense, a través de conciertos didácticos y la creación de públicos que conozcan y aprecien esta música.

KINTETO divulga la obra de los maestros académicos del Fondo Histórico Documental de la Música Nicaragüense, en arreglos para el formato de cámara, realizados especialmente para este conjunto; así también promueve dentro de sus actividades, además de lo cultural, el campo de la música recreativa, contando con arreglos de música nacional, repertorio universal (Mozart, Haydn, Schubert y otros) y piezas semiclásicas y recreativas.

Durante más de 15 años se ha dedicado, a la formación de profesores de música en más de 11 municipios; esto a su vez ha posibilitado la formación de más de 50 grupos de Música y unos 500 niños(as) y jóvenes que interpretan un instrumento musical. Kinteto es el mayor colaborador en la publicación de textos pedagógicos, metodológicos de la más alta calidad, estos textos tienen una gran importancia nacional.

El Grupo de Cámara Kinteto, en consorcio con el Fondo Histórico-documental de la Música Nicaragüense (FONMUNIC), está comprometido y aportando de diversas maneras, a un hecho trascendental, no solo para la música, sino también para la cultura nacional. Y es la creación del Museo Nicaragüense de la Música; esto en colaboración con el Instituto Nicaragüense de cultura el cual está aportando sustantivamente a la realización de este sueño para los músicos y la música Nica y de la Real Embajada de Noruega a través del Programa de Apoyo al Sector Cultura. Ya se encuentran instalando el Museo Nicaragüense de la Música en la Colonia Dambach , un sueño hecho realidad.

Y la labor casi anónima, callada y de vocación, sigue! ! !