La felicidad y el dinero
El dinero contribuye a la felicidad, a mayores ingresos más felicidad, sin embargo, a partir de cierto punto, satisfechas las necesidades básicas, tener más dinero no incrementa las experiencias positivas, y lo que ocurre es que cuando los ingresos nos permiten vivir con cierta comodidad, el bienestar emocional comienza a depender de otras cosas, incluido el temperamento de cada uno.
Con dinero la gente se siente más autosuficiente, independiente, más libre. Varios estudios realizados en forma de encuestas en más de 60 países nos sugieren que el dinero lleva a la autonomía, lo cual produce satisfacción pero no aumenta el bienestar ni la felicidad, porque la autonomía fomenta el individualismo y reduce las motivaciones comunes. Otros factores como el optimismo, la autoestima y la gratitud, o rasgos básicos de personalidad como la extraversión y la estabilidad emocional, aparecen relacionados con mayores niveles de felicidad que no dependen del dinero que se posea.
Autolesiones cada vez más frecuentes
Cada vez más niños y adolescentes, les da por cortarse la piel con cuchillas, sin o con intención de suicidio, como consecuencia de sentimientos de culpa producto de conflictos no resueltos, una respuesta a la agresión social. Son jóvenes con dificultades de comunicación, introvertidos, y autolesionarse les produce alivio de su dolor emocional.
El dolor moral lo canalizan por sufrimiento físico, pero también puede ser un intento de pedir ayuda. Cortarse, arrancarse el cabello, las pestañas o las cejas, morderse, arañarse, golpearse, dar puñetazos a las paredes, son algunas formas comunes de autolesión en adolescentes, y que continúan realizando en edad adulta si no son atendidos. Los que presentan autolesiones y actos suicidas. Sería el grupo de mayor riesgo suicida, mayor psicopatología y alteraciones psicosociales, mayor anhedonía, peor autoevaluación, depresión más grave, indefensión e impulsividad, mayor frecuencia de ideación suicida, menos razones para vivir, según un amplio estudio realizado por Hamza y col. 2012)
