Antes de que el presidente del Consejo Supremo Electoral, Roberto Rivas, anunciara los primeros informes preliminares de las votaciones de las elecciones presidenciales del domingo, los simpatizantes sandinistas celebraban con anticipación el triunfo electoral de la Alianza Unida, Nicaragua Triunfa, que preside el FSLN, en la Plaza de las Victorias y rotondas de la capital. Un mar de jóvenes se congregó en esa Plaza desde tempranas horas de la noche, para festejar la victoria del candidato Daniel Ortega, considerado desde antes por las encuestas de opinión pública como el ganador de los comicios. Muchos de ellos enarbolaban banderas rojinegras y de Nicaragua, mientras otros disparaban sus tradicionales morteros. Otros sandinistas en caravana de vehículos y motocicletas tocaban sus claxon por las principales avenidas de Managua, desveladas por ese proceso electoral que transcurrió, según las autoridades del CSE y la Policía con tranquilidad, con la excepción de algunos brotes de violencia pero que no empañaron todo el proceso.