Lo bueno, lo discutible y lo malo
Néstor Avendaño, economista y presidente de COPADES
II y Ultima Parte
Lo discutible
"El Estado podrá celebrar contrato u otorgar concesión para la construcción y explotación racional de un Canal Interoceánico, las cuales deberán considerar cuando se trate de inversión con empresas extranjeras, la conformación de consorcios con empresas nacionales para promover el empleo. Las leyes de la materia para su aprobación, reforma, o derogación, requerirán el voto del sesenta por ciento del total de Diputados de la Asamblea Nacional de Nicaragua." En el caso que aparezca la formulación y ejecución de otro megaproyecto, ¿habría que reformar de nuevo la Carta Magna para introducir su nombre?
"Los funcionarios electos mediante sufragio universal por listas cerradas propuestas por partidos políticos, que se cambien de opción electoral en el ejercicio de su cargo, contraviniendo el mandato del pueblo elector expresado en las urnas, perderán su condición de electo debiendo asumir el escaño su suplente". Si se buscara efectivamente la democracia directa, sólo el pueblo podría remover a dichos funcionarios electos. Si esos funcionarios electos continúan siendo escogidos por el líder del partido político, la reforma es aceptable.
Lo malo
La limitación de la cobertura de nuestra Carta Magna al refrendarse la inspiración estatal con los valores cristianos, los ideales socialistas y las prácticas solidarias, democráticas y humanísticas. ¿Por qué circunscribir la opción preferencial por los pobres sólo entre los valores cristianos, excluyendo a los valores musulmanes, judíos y ateos? ¿Por qué encasillar a la inclusión, la justicia y la igualdad entre los ideales socialistas, sin considerar los ideales capitalistas y comunistas? ¿Por qué limitar la atención a los más desfavorecidos y marginados en la solidaridad nacional cuando, sobre todo, es una obligación estatal? La responsabilidad social no es un sinónimo de socialista ni de solidario ni de cristiano. La responsabilidad social es una obligación estatal que debería observarse en la política fiscal, mejor dicho, en la prioridad de la asignación de los recursos del Presupuesto General de la República, que son destinados a todos los nicaragüenses independientemente que sean cristianos, socialistas y solidarios. Es obvio que la cobertura de nuestra Carta Magna debe ser para todos los nicaragüenses.
(El Ejército y la Policía Nacional) estarán sometidos a "la autoridad civil que será ejercida directamente por el Presidente de la República en su carácter de Jefe Supremo del Ejército de Nicaragua. Al eliminarse "o a través del Ministerio correspondiente" y darle rango constitucional a la relación entre el Presidente de la República y esas dos instituciones de seguridad nacional, ¿cuál será el papel de Ministerio de Defensa y del Ministerio de Gobernación en lo relativo al control de la Policía Nacional, que en el caso de no ser imprescindibles implicaría las reformas de la Ley del Presupuesto General de la República y de la Ley de Organización del Estado?
"Los miembros del Ejército de Nicaragua y de la Policía Nacional podrán ocupar cargos temporalmente en el ámbito de Poder Ejecutivo por razones de seguridad nacional cuando el interés supremo de la nación así lo demande. En este caso el Militar o Policía estarán en comisión de servicio externo para todos los efectos legales". El militar activo es un profesional en el arte militar y, dicho sea de paso, el presidente de la República debería nombrar a personas no militares en cargos que no son de elección popular, por ejemplo, un ministro de Estado o un presidente de un ente autónomo, con conocimientos apropiados para el funcionamiento del cargo, o sea, no exclusivamente con base en la confianza política.
