¿ASOMBRADOS?.-Por la manipulación de un dramático caso de violación en una menor, para atacar el aborto terapéutico por tan largos años legitimado en Nicaragua…No de ninguna manera. ¿Acaso no conocemos el estilo y el tamaño de los escrúpulos de ésta gente?...Son los mismos, con que la inconfundible mala cara de anti-religiosos, atormentaron al Papa, y luego nada arrepentidos, pero convencidos de lo beneficioso que sería para sus pretensiones, se transformaron en "corderitos del señor", y decidieron prohibir el aborto terapéutico que defiende la vida de la mujer en casos cruciales, como lo es dejar una familia sin cabeza…¡Qué importaba esa ley si a los todopoderosos, que en países como el nuestro hacen lo que se les antoje, no los afectaba un milímetro!...Si la revolución fue un engaño, éste era un engaño menor.
QUE CONTRASTE.-La violación pasa a un segundo plano para atacar el aborto terapéutico, del cual, soy partidario, quizás porque soy el padre de cinco mujeres, y con o sin ley, no vacilaría en buscar como aplicarlo, listo para caer preso, con tal de salvar la vida de cualquiera de ellas…Posiblemente, esa actitud de minimizar el delito, obedeció a que la violación de la Constitución en busca de una reelección contra viento y marea, algo políticamente delincuencial, fue pasada de noche por las Instituciones y Organismos, que se supone, estén atentos a defender lo establecido en la carta magna y pararse con firmeza…Puede que el objetivo es darnos a entender que no se debe intentar abortar una reelección, aunque sea producto de una violación de la Constitución. No se que piensan ustedes.
NO TENER MIEDO.-De poder decir con claridad, y tan directamente como los jabs de Alexis Arguello, lo que uno piensa y siente, se ha convertido en un lujo en este país. No tiene precio. Quizás sólo se pueda hacer desde la llanura, sin estar preocupado por la obtención de beneficios. Es sabroso, porque uno se siente libre, no prisionero, ni chantajeado, ni humillado, y conservando leves esperanzas de poder llegar a ver un cambio pese a lo carcomido de nuestro presente, por quienes mataron la posibilidad de una futura revolución…El domingo frente a las urnas, todos podemos perder el miedo yendo directamente al grano, pensando en el futuro que nos espera…Si no aprovechamos, tendrán que esperar ustedes algunos períodos más. Yo por lo menos vivi en una época en que desde la oposición, con dignidad, supe crecer sin ponerme de rodillas.
OJALA.-El voto fuera abierto y filmado. ¡Qué bueno sería por un instante, votar sin miedo frente a las cámaras, para poder comprobar los conteos electorales. Saber que cada uno de nuestros votos esta con la "equis" correcta, con nombre y apellido…Eso evitaría cualquier especulación sobre fraude. El resultado sería legítimo al colocar en las paredes como votó cada uno, como se hace para el Cy Young o El Más Valioso, y verificar la suma total…No importa que eso nos tome un mes, porque vale la pena…¡Así sabríamos que sectores son los responsables que todo siga igual, o que se produzca un cambio!... A riesgo que el miedo se agrande, una votación así sometida a riguroso chequeo, es lo que necesitamos. ¡No importa que sea Roberto Rivas quien haga el conteo, porque sería en presencia de todos, cadena nacional de TV!
ESTOY CLARO.-Que no es escribiendo columnas o rugiendo por un micrófono, que se va terminar con un sistema como éste que combatimos desde hace un buen rato, pero lo mismo creí en los años 70, y de grano en grano se fue levantando una montaña de inconformidad…Pese a vivir bien en los 70, establecido como Jefe de Deportes en La Prensa manejada por Pedro Joaquín, igual que ahora, sentí la necesidad de contribuir opinando, como lo hago ahora, con la camisa abierta…Recuerdo mi columna cuando en septiembre del 78 Somoza creyó haber sobrevivido…"Vamos a extrainning. El tirano no podrá dormir. Hay que seguirle exigiendo que se vaya. Es una obligación de todos los que deseamos vivir en un país mejor", escribí….Claro, cómo conseguir que un pueblo entero se sume, toma tiempo, pero los jóvenes, lo tienen…Sólo se necesita mantenerse tercamente en pie de lucha.
